Alexandra Pecoraro, translated by Araceli Gonzalez
Esas palabras resuenan entre la multitud, el grupo de amigos, los desconocidos en los medios sociales…” ¿Por qué no lo reportaste?” ¿Por qué esperaste tanto tiempo para decir algo?
Yo creo que la violencia sexual impregna todos los aspectos de nuestras vidas. Vemos violencia sexual en las películas, series, y anuncios. Es usada como una técnica de ventas, para mostrar “erotismo”, y como broma. Y luego en relaciones interpersonales, la gente piensa que el asalto no puede ser posible en una relación, entre miembros de la familia o por más de una persona. Y luego el clavo final de nuestra percepción de violencia sexual es que los niños se les enseña que deben abrazar y tocar a los adultos, se les dice a los niños que si alguien es grosero o agresivo solo significa que es una persona especial, y padres y maestros al igual prefieren evitar discusiones de cuerpos, sexualidad y reproducción.
Estas normas de silencio y mitos sobre la violencia sexual comienzan a influenciar desde la adolecencia. Se nos dice ideas deformadas sobre el consentimiento, sexo, y que la atracción signigfica cuando la violencia sexual ocurre. Alguna gente no sabe. Puede tomar meses o incluso años para que algún sobreviviente se de cuenta de que es un sobreviviente.
La vergüenza es una experiencia emocional negativa y disturbante, que envuelve sentimientos de autoculpa y el deseo de esconder la parte dañada de otros (https://journals-sagepub-com.mutex.gmu.edu/doi/pdf/10.1177/1077559505276686).
Un sobreviviente puede estar totalmente consciente de que fueron asaltados pero llenos de vergüenza de lo que les pasó. Es una respuesta válida y normal pero también detiene a la gente de hablarlo y buscar ayuda.
La violencia sexual esta arraigada en poder y control, y por el otro lado, esto significa que el sobreviviente fue robado de su poder y control de su cuerpo y experiencias. Parte de la vergüenza tiene que ver con las maneras de cómo uno pudo haber detenido el asalto y el de haber tomado de regreso el control.
Alguna de las maneras más comunes que la vergüenza se muestra en un sobreviviente es diciendose asi mismo:
La vergüenza tiene la tendencia de afectar más a los sobrevivientes que son hombres o los sobrevivientes que conocen más a su asaltante. Si es un amigo cercano o un familiar, decir algo puede romper relaciones familiares, grupo de amigos, y pudiera provocar que el sobreviviente perdiera el sentido de comunidad y seguridad. Sobrevivientes que son hombres son enseñados desde pequeños que los hombres no pueden ser víctimas de asalto sexual porque ellos están en control y ellos quieren sexo. Entonces, la idea de ser vulnerable, sin poder y asaltados no “combate” la narrativa.
Como se mencionó anteriormente, la violencia sexual es un problema de poder entonces cuando el asaltante trata de mantener el poder y control hay amenazas de violencia si el sobreviviente dice algo. Esta violencia puede ser hacia los sobrevivientes personalmente o a su familia y amigos. Entonces conectados a mantener el poder y control, cerca del 80% de los asaltantes conocen a su víctima. Esto significa que de seguro conocen las mismas personas, por lo que los asaltantes pueden manipular amigos, familia y compañeros de trabajo para que crean que el sobreviviente está mintiendo.
Al no creerle a alguien o tenerle represalias no solo está hecho por el asaltante , pero tambien tiene que ver con la idea general de que la violencia sexual no es un problema. Esto está resaltado en el documental The Hunting Ground. Uno de los más prominentes modos de como se ve la culpa hacia la víctima y silencio es la historia de James Winston. En 2012 una estudiante del FSU, Erika Kinsman, fue asaltada por Winston. Después de un par de días ella fue al hospital, tuvo su examen de violacion hecho y lo reportó a las autoridades. Había suficiente evidencia contra Winston para ser detenido e interrogado al día siguiente pero hasta este día eso nunca pasó. Un año después la escuela comenzó a “investigar” públicamente. Este era el año en que la carrera deportiva de Winston estaba por los cielos y ganó el Trofeo Heisman… Pero mientras tanto, a pesar de la evidencia de ADN, no justicia o castigo le vino a Winston. Mientras que él festejaba su maravilloso año, Erica era perseguida y acosada por los fans, estudiantes y miembros de la facultad, y ella dejó la escuela. Mientras que ella estaba probablemente procesando todo esto y sanando, él estaba jugando para la NFL. Winston no le estaba diciendo a los Oficiales, fans, o miembros de la escuela que ignoraran a Erika, ellos lo hacían por sí mismos. Por la gloria del Fútbol, porque él dijo que el sexo fue consensual, porque la gente si esta tomada no puede haber violacion? No hay manera de saber las razones porqué, pero así sucedió.
Para cualquier persona que esté leyendo esto y diga que fue una falsa acusación, el asalto y el reporte paso antes de que él fuera estrella, entonces no había una motivación de dinero por difamar a una estrella pública. Y luego adicionalmente otras lo acusaron, y en el 2018 lo suspendieron de tres juegos por tocar a un conductor de Uber.
Voy a hacer un comentario adicional acerca de esto, porque es muy aturdido. Pero en breve, muchos sobrevivientes no quieren pasar por múltiples años de investigación y juicios. El sistema judicial no está informado sobre el trauma o diseñado para proteger a los sobrevivientes, entonces por años tienen que ver al asaltante y relatar la historia miles de veces, muchas veces por una mínima sentencia o ninguna sentencia porque fue sentenciado como error o mala decisión. (Si no me crees esto, checa lo que escribi con palabras de jueces durante juicios de asalto sexual).