Alexandra Pecoraro, translated by Stefany Sierra
Independientemente de las partes felices y positivas de la celebración, estar con amigos, familias y comidas abundantes tiende a generar comentarios, preguntas y opiniones no deseados sin tener en cuenta lo que pueda estar sucediendo en su vida.
¡Felices fiestas, amigos! Nos tomamos el mes de noviembre libre para darles a los escritores, editores y traductores la oportunidad de ponerse al día, descansar y cuidarse, pero estamos de regreso y listos.
Esta temporada navideña ha sido un poco diferente porque COVID nos ha mantenido alejados de nuestras celebraciones e interacciones familiares normales. A pesar de estos obstáculos, muchos todavía han encontrado formas de celebrar virtualmente, distanciados socialmente o con compañeros de cuarto. Independientemente de las partes felices y positivas de la celebración, estar con amigos, familias y comidas abundantes tiende a generar comentarios, preguntas y opiniones no deseados sin tener en cuenta lo que pueda estar sucediendo en su vida.
"Oh, has ganado algo de peso ... ¿has estado estresado en el trabajo?"
"Estás tan flaco. ¡Bien por ti, te ves bien!"
"¿¡Vas por un tercer plato !?"
"¿Estás seguro de que quieres comer todo eso?"
"Esa ropa te queda un poco ajustada, ¿no?"
Si estás leyendo esto y esta experiencia resuena contigo, quiero que sepas que no estás solo. Los días festivos y las celebraciones son difíciles para muchos, especialmente para las personas que tienen un historial de problemas y luchas con la imagen corporal. Para aquellos que han experimentado esta lucha o están viviendo esta lucha por primera vez, a continuación se presentan algunos consejos que nos ayudarán a disfrutar de las vacaciones.
1. Crea un plan de cuidado personal
Tener herramientas y planes para afrontar el momento, pero también planes de autocuidado a largo plazo. Esto puede parecer un diario, pasar tiempo lejos de los teléfonos y las pantallas, salir a caminar, jugar un videojuego. Cualquier cosa que necesite hacer que le ayude a cuidarse, planifique un tiempo para ello.
2. Establecer límites
Con amigos, familiares y seres queridos, si hay una conversación en la que no deseas participar, tienes todo el derecho a decir que no y alejarte. También puedes crear ese límite de antemano diciéndoles a las personas que no te sientes cómodo hablando de temas x, y, z en un entorno de celebración pública. Finalmente, también puedes crear planes para cambiar de tema cambiando la conversación de la imagen corporal y la comida.
3. Comunícate con amigos, seres queridos y familiares que te apoyen
Pueden ser personas que participan en las celebraciones o personas ajenas a ellas. Ten en cuenta a las personas con las que puedes asociarte y tener mini sesiones de desahogo cuando sea necesario. Si te encuentras las 24 horas del día, los 7 días de la semana, busca ayuda y encuentra formas de escapar. Puede haber una conversación más amplia en torno a buscar apoyo profesional o establecer límites para no estar cerca (en persona y a distancia) de amigos y familiares de la misma manera.
4. Conéctate con profesionales
Comunícate con profesionales para desarrollar y reforzar habilidades saludables de afrontamiento y autocuidado. Mientras también trabajas en formas de deconstruir y procesar el núcleo de tus emociones y experiencias.
Cuídate y lo tienes.
¡Felices vacaciones!